Los alimentos frescos facilitan la recuperación en el Cañón de Santiam
Jack, voluntario de la despensa, clasifica alimentos en el Centro de Asistencia Comunitaria de Mill City/Gates.
Cuando los incendios forestales arrasaron el Cañón de Santiam el pasado septiembre, incinerando enormes franjas del paisaje y destruyendo cientos de viviendas y negocios, miles de residentes desplazados se dispersaron cerca y lejos para buscar refugio en hoteles o bajo los tejados de amigos y familiares.
Casi seis meses después, algunos residentes están regresando lentamente al cañón para lo que será un amplio esfuerzo de recuperación. Al igual que los bosques quemados, a las comunidades del cañón les espera un largo periodo de rebrote.
Según Susann, coordinadora de despensas del Centro de Asistencia Comunitaria de Mill City/Gates, los retos a los que se enfrentan los residentes que regresan tendrán un profundo efecto en la forma en que el cañón se recupere de los incendios. Facilitar a la gente la obtención de alimentos es clave para ayudar a restaurar su comunidad, afirma.
“Creo que la comida que ofrecemos a la gente ahora es suficiente para que sigan pensando en volver”, afirma Susann, “porque si no, veo cómo los pueblos se convierten en ciudades fantasma, lo cual es muy, muy triste”.
Gran parte de su trabajo consiste ahora en realizar actividades de divulgación, desde correr la voz sobre el banco de alimentos en las redes sociales hasta colocar folletos en el ayuntamiento, la oficina de correos y otros lugares por los que es probable que pasen los residentes que regresan. Cuando los remolques de la FEMA se instalaron en Mill City a principios de año para alojar a los residentes desplazados, los voluntarios de la despensa se apresuraron a informarles de que había alimentos disponibles.
La coordinadora de la despensa, Susann, afirma que el acceso a alimentos frescos es crucial para la recuperación de su comunidad tras los incendios forestales.
“Les hemos hecho correr la voz para que sepan: ‘venid al banco de alimentos e intentaremos meter cosas en vuestra despensa para que tengáis comida para empezar'”. dijo Susann.
Dado que la capacidad de los frigoríficos y congeladores es limitada para los que viven en remolques de la FEMA y para muchos otros que viven en caravanas y remolques de viaje, los voluntarios de la despensa animan a los clientes a visitarla con más frecuencia para reponer productos frescos como leche, productos agrícolas, huevos y carne. Para ayudar a la despensa a mantener esos productos esenciales en stock, Marion Polk Food Share duplicó la frecuencia de las entregas a Mill City a raíz de los incendios.
“Recibir una entrega cada semana nos permite tener más cosas a disposición de la gente y una selección más amplia, lo que para mí es maravilloso”, dijo Susann. “Poder decir a la gente: ‘venid más de una vez al mes si necesitáis reponer vuestro remolque’. Antes no podíamos hacerlo. Para mí, eso ha supuesto una gran diferencia”.
Nuestra comunidad respondió rápidamente a los incendios forestales con una abrumadora avalancha de apoyo. Ese apoyo hizo posible que Food Share no sólo proporcionara alimentos a los evacuados inmediatamente después de los incendios, sino que siguiera ayudando a nuestros organismos asociados de Santiam Canyon a recuperar sus comunidades.
Agradecemos la generosidad de Northwest Farm Credit Services, OCCU Foundation, la comunidad de clientes de South Salem Ace Hardware, Subaru of America, Weyerhaeuser Company Foundation y miembros de la comunidad como usted. Gracias a usted, los residentes de Santiam Canyon que han regresado están reconstruyendo sus comunidades y sus vidas sin tener que preocuparse por poner comida en la mesa.
